El Héroe de las Eras, de Brandon Sanderson

 

Imagen de Giselle Almeida.

*Conviene no leer la sinopsis ni esta entrada en general si no has leído los dos primeros libros de Nacidos de la Bruma. Aquí puedes leer mis reseñas sobre El Imperio Final y El Pozo de la Ascensión.

Sinopsis:

El Héroe de las Eras es el tercer volumen de la saga "Nacidos de la Bruma (Mistborn)", una obra iniciada con El Imperio final y parte imprescindible del Cosmere, el universo destinado a dar forma a la serie más extensa y fascinante jamás escrita en el ámbito de la fantasía épica.

Durante mil años nada ha cambiado: han caído las cenizas, los skaa han sido esclavizados y el Lord Legislador ha dominado el mundo. Kelsier, «el superviviente», el único que ha logrado huir de los Pozos de Hathsin, junto a Vin, una pobre chica skaa, se une a la rebelión. Y por fin lo imposible sucede: por fin la revolución ha triunfado. Pero acabar con el Lord Legislador es la parte sencilla. El verdadero desafío consistirá en sobrevivir a las consecuencias de su caída... sin Kelsier.

Vin y el Rey Elend buscan en los últimos escondites de recursos del Lord Legislador y, engañado, el Rey libera del Pozo de la Ascensión algo que debería haber quedado oculto para siempre. Un enorme peligro acecha a la humanidad, y la verdadera pregunta es si conseguirán detenerlo a tiempo.

En El Héroe de las Eras se comprende el porqué de las nieblas y las cenizas, las tenebrosas acciones del Lord Legislador y la naturaleza del Pozo de la Ascensión. Esta aventura lleva a la trilogía a un clímax dramático y sorprendente.

Ficha:

Título: El Héroe de las Eras (Nacidos de la Bruma IIi).

Autor: Brandon Sanderson

Traducción: Rafael Marín Trechera, galeradas revisadas por Antonio Torrubia. Edición revisada por Ángel Lorenzo y Tamara Tonetti con la colaboración de Manu Viciano.

Editorial: Nova (Penguin Random House Grupo Editorial)

Portada: Pepe Medina

Número de páginas: 760

Sobre el autor:

Brandon Sanderson es un escritor de fantasía nacido en Nebraska (Estados Unidos). Es un autor muy prolífico que ha escrito obras tan importantes para la literatura fantástica actual como Elantris (Nova 2006) o sagas tan reconocidas como Nacidos de la Bruma y El Archivo de las Tormentas. También tiene en su haber obras orientadas hacia la literatura juvenil y al cómic. Es reconocido por la creación de sistemas de magia para sus libros (sistemas de magia dura y blanda) y por la creación del Cosmere (el universo en el cual suceden muchas de sus obras, formado por una galaxia en la que sus historias suceden en distintos mundos con las mismas leyes físicas y reglas mágicas compartidas).

Reseña:

El Héroe de las Eras es el tercer libro de "Nacidos de la Bruma" (Mistborn) y por tanto esta reseña contiene destripes de sus dos primeras partes (El Imperio Final y El Pozo de la Ascensión).

Cuando alguien quiere leer la reseña del final de una trilogía, lo hace la mayoría de las veces buscando la opinión de otra persona que lo haya leído para confrontar ideas y sensaciones. Siempre he creído que las reseñas sirven para iniciarte (o no) en una saga (en caso de hablar sobre una), y que las continuaciones a la hora de ser reseñadas, van más dirigidas a lo que menciono. Siendo este mi modo de entender las reseñas de libros que continúen otros, voy a centrarme en esta ocasión en la conclusión pura y dura que Sanderson da a esta primera era de Nacidos de la Bruma.

Hay que aclarar que cuando hablamos de "primera era", nos referimos a que el autor pretende que esta saga se extienda a lo largo de cuatro. Esta trilogía que finaliza en El Héroe de las Eras abarcaría la primera. La segunda concluirá próximamente con el último libro de su tetralogía. Las dos últimas hoy por hoy tenemos algunos pequeños datos pero nada más. No obstante, El Héroe de las Eras concluye todos los arcos que se han abierto a lo largo de los tres libros, sin dejar al lector con la necesidad imperiosa de continuar para saber más de algún personaje o situación ─de hecho cada era dará un salto considerable en el tiempo─.

Decía Sanderson en el prólogo, que se enfrentaba por primera vez a la conclusión de una de sus sagas dentro del Cosmere ─universo que comparten muchas de sus obras─. Tiene varios libros que por ahora se mantienen como únicos y quizá autoconclusivos si decide no alargar su historia con nuevos títulos, pero aquí tenía entre manos el cierre de una trilogía, con la dificultad que ello conlleva. El Imperio Final y El Pozo de la Ascensión son bajo mi punto de vista, dos obras de un nivel muy alto que están marcando tendencia en la fantasía actual. El reto de concluir la historia por todo lo alto se antojaba mayúsculo. Tras acabar el libro, puedo dar fe de que Sanderson ha logrado cerrar de forma formidable, hasta tal punto que he dejado pasar varios días para escribir estas palabras, ya que quería valorar con algo más de perspectiva mis sensaciones iniciales: estamos ante una de las mejores conclusiones de una saga fantástica. 

El estilo narrativo sigue intacto, siendo perfectamente reconocible, alternando momentos de una acción desenfrenada y de acontecimientos que se suceden de forma frenética, con otros más sosegados en los que se continúa construyendo el mundo de Nacidos de la Bruma y definiendo el devenir de sus personajes. Vamos a quedar satisfechos con el protagonismo que se da a viejos conocidos y algo sorprendidos con el otorgado a otros que hasta ahora habían pasado de puntillas. De este modo, Vin, Elend, Sazed, Fantasma y TenSoon centran la atención de los distintos arcos narrativos. 

Durante todo el nudo de la novela, he disfrutado de cada uno de estos arcos que se van exponiendo, pero sí que he de decir que en alguna ocasión me asaltó la idea de que podría haberse contado todo con bastantes menos páginas. Esta sensación se ha evaporado casi totalmente con el final ya que todo lo narrado llega a un punto común en el que todo casa de forma fantástica. Qué gratificante resulta comprobar que Sanderson tenía todo bien atado y que el «viaje» de cada personaje está perfectamente estudiado y medido para no caer en la sensación de que alguno haya sido intrascendente. 

Al leer este final, percibimos que Sanderson ha sido muy respetuoso con todos sus personajes y sobre todo, con el misterio último que se esconde detrás de toda la obra. 

Es de recibo señalar que en mi edición ─la ilustrada que podéis ver tras la ficha del libro─ existe un error de traducción recurrente ─si fuese aislado no lo citaría─. Uno de los personajes principales tiene cambiado su nombre con respecto a otro que es totalmente intrascendente. Resulta algo frustrante ver cómo a lo largo de todo el libro, se habla de él usando uno y otro nombre de forma indistinta, incluso cuando los demás se refieren a él y usan ambos en el mismo párrafo. Es llamativo, puesto que los dos nombres tienen un inicio idéntico y pienso que de ahí puede venir el error a la hora de gestionar la traducción usando un banco de nombres ya registrado previamente, pero sorprende que una edición del 2021 mantenga esta errata que insisto, es recurrente en todo el libro.

En definitiva, si has disfrutado de los dos primeros tomos, este último supone la auténtica guinda a una historia y unos personajes que por derecho propio quedarán en mi recuerdo. Hubo un tiempo en el que no sabía si quería leer en su totalidad las obras que abarcan el Cosmere ─hay tanto por leer que a veces da cierto vértigo adentrarte en un universo tan grande─ pero tras terminar la primera era de Nacidos de la Bruma, no tengo ni la menor duda de que quiero emplear gran parte de mi tiempo como lector en bucear en todo lo que Sanderson quiera contarnos de este gran proyecto que tiene pinta de que en algún momento confluirá en un punto común y allí estaré yo para leerlo.

Soy, por desgracia, el Héroe de las Eras.

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