El demonio de Próspero, de K. J. Parker
Sinopsis:
«Regla Número Uno: Nada de negociar»
« En una extracción chapucera, el demonio siente lo que siente el huésped multiplicado por diez. Pero Ellos no mueren y nosotros sí. Equilibrio».
Pero cuando se encuentra cara a cara con el demonio que ha poseído a Próspero de Schanz, el hombre más sabio de todos los tiempos, todo puede venirse abajo.
Con su característico estilo mordaz e irónico, K. J. Parker nos ofrece un relato a medio camino entre la fantasía y el terror, donde hombres y demonios compiten en ingenio y amoralidad. ¿Quién saldrá mejor parado?
Ficha:
Título: El demonio de Próspero.
Autor: K. J. Parker.
Editorial: Red Key Books
Portada: Michael Ende
Número de páginas: 98
Sobre el autor:
K. J. Parker —también conocido como Tom Holt— publicó su primer libro cuando tenía doce años y ha estado escribiendo desde entonces. Ha escrito más de 70 libros y ha ganado dos veces el World Fantasy Award por sus novelas cortas.
En 2022 se estrena la película de su novela de humor y fantasía The Portable Door. Después de una carrera corta e ignominiosa como abogado, Parker se convirtió en escritor a tiempo completo hace 25 años. Vive en el oeste de Inglaterra y, cuando no escribe, cría vacas y cerdos en su parcela de 2 hectáreas.
Ha publicado varias trilogías de fantasía, entre ellas, Fencer, Scavenger, The Two os Swords y Engineer. Además, es autor de numerosas novelas (The Folding Knife, Sharps), así como cuentos, antologías (Academic Exercises, The Father of Lies) y novelas cortas. Recientemente ha publicado A Practical Guide to Conquering the World, la novela que concluye la serie iniciada con Sixteen Ways to Defend a Walled City y que continuó con How to Rule an Empire and Get Away With It.
Con El demonio de Próspero, Parker dio comienzo en 2020 a una nueva serie, cuya continuación es Inside Man, publicada también por Red Key Books.
Reseña:
Mi primera incursión en una obra editada por Red Key Books es una novela corta —no llega a las 100 páginas— escrita por K. J. Parker, quien tiene en su haber una buena pila de publicaciones con varios éxitos a sus espaldas.
El demonio de Próspero me sugirió por su sinopsis algo que en realidad no es. Comencé su lectura con una idea equivocada y por tanto quería aclarar esto en un primer momento: no es una novela de terror ni con tintes de ello más allá de su temática
Estamos ante un libro que aborda la lucha de un exorcista con los demonios que invaden los cuerpos de las personas, torturándolas, escondiéndose allí durante años en ocasiones. Dicho así, alguien podría decir que es innegable su vertiente terrorífica, pero la prosa de Parker no va por esos derroteros, siendo algo más cercano a la fantasía oscura.
El protagonista es alguien mordaz, cruel, irónico y con una total falta de escrúpulos. Lo que todos podemos entender como un «antihéroe». Son cualidades que por un lado se antojan necesarias en su profesión, pero que por otro vamos a ir viendo que parecen innatas en él más que fruto de su contacto con este tipo de seres. Llama la atención que no se le dé un nombre, que funcione como alguien totalmente anónimo sobre quien vamos conociendo poco a poco más de su pasado y su personalidad.
El estilo de Parker es directo, sin filigranas —aunque no por ello su prosa es simple— y de lectura muy rápida y amena. Las páginas se suceden en una historia que se cuece a fuego lento, con un arranque de los que marcan y una regresión al pasado del protagonista constante para conocer mejor su personalidad.
El punto fuerte de esta novela lo podemos encontrar en sus diálogos. Ya sea entre el protagonista y los demonios o con Próspero —un genio que ha sido poseído y sobre el que se basa el título del libro—. El autor se centra tanto en estas conversaciones y en la lucha dialéctica que se produce con los demonios, que llega a obviar la descripción de cualquier exorcismo. Incluso el final, que es sorprendente aunque totalmente consecuente con la historia y la personalidad de nuestro mordaz exorcista, llama la atención por ser quizá algo abrupto y con poco detalle. El cómo acontecen los sucesos queda relegado al fin último. Fiel totalmente a lo que hemos leído hasta ese momento.
Existe detrás de la historia, un «plan demoníaco» que subyace como futuro eje central quizá de próximas obras que sucedan a esta, pero que queda relegado a la inmediatez que rige la vida de quien no entiende más realidad que la del odio al ser sobrenatural al que combate.
Hay detalles que dejan entrever cómo es el mundo en el que se desarrolla la historia. Pequeñas pinceladas que dejan con ganas de saber más pero que hacen, si cabe, todavía más relevante la intención de destacar sobre todo lo demás ese diálogo y relación entre demonio y exorcista. Esas pinceladas, no obstante, generan un entorno de lo más atractivo y sugerente para el lector.
En definitiva, El demonio de Próspero es una novela corta, que se lee de una sentada —o en un par—, con una historia subyacente que puede que se desarrolle más adelante pero que apuesta todas sus cartas a un protagonista de los que no se olvidan. Deja con ganas de más, tanto por su corta extensión, como por algunas implicaciones de los actos que suceden al final. De hecho, la sensación es la de querer continuar y no dejarlo justo donde acaba. No obstante, hay que aclarar que funciona perfectamente como novela independiente, cerrando el arco principal que expone.
Cuando me desperté, ella estaba tumbada a mi lado, bien muerta, con la garganta desgarrada. La almohada estaba empapada de sangre brillante, como una pradera tras una semana de lluvias copiosas.
Cuando me desperté, ella estaba tumbada a mi lado, bien muerta, con la garganta desgarrada. La almohada estaba empapada de sangre brillante, como una pradera tras una semana de lluvias copiosas.
El exorcista.
Excelente felicidades!desde México
ResponderEliminarMuchas gracias. Si te animas con el libro, que sepas que la segunda parte (Infiltrado) está al caer.
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